Deprimidos

Por Alejandro Marchionna Faré

Podría ser el título de una nueva tira de algún canal de aire, protagonizada por Adrián y la Tana. Pero no: es el estado en el que están muchos observadores del Cirque du Soleil crioyo y por supuesto muchos empresarios cuya memoria es más corta que las mechas encendidas por un saboteador.

Y es que, haciendo gala del realismo mágico tan caro al bolsillo de los argentinos, en 2015 muchos, muchísimos pensaron que todo estaba conquistado con la alternancia. Pero estas eran sólo algunas variables del macroentorno que podría haber observado con más objetividad un inversor extranjero:

  • El cepo cambiario, “bomba” si alguna vez existió alguna.
  • El default técnico frente a los holdouts.
  • El tremendo desorden de las cuentas públicas por corrupción, por indolencia y por demagogia.
  • La gigantesca presión fiscal que oprime todavía a los contribuyentes en regla.
  • A esa presión fiscal escandinava se contraponen servicios del Estado que permanecen todavía en niveles de país caribeño o africano pobre.
  • Las distorsiones introducidas en particular en el sector energético (se llegó a pagar al gas en el pozo argentino un 15% de lo que se le pagaba a su homólogo boliviano…) y en todos los servicios públicos.
  • La destrucción sembrada en el motor de la economía argentina: el agro y sus cadenas de valor (agricultura, ganadería, economías regionales).
  • La mentira lisa y llana que representaban las estadísticas sociales y económicas oficiales.
  • La colonización de la justicia para asegurar la impunidad y la continuidad del fraude.
  • La ideologización de la educación, privilegiando la arenga partidaria por sobre el rendimiento medible a escala internacional.
  • La transformación de las FF.AA. en un aparato de espionaje interno por sobre las necesidades de defensa de las fronteras.
  • La esclavitud de las clases más desamparadas, que siguen siendo movilizadas sin una comprensión clara de las causas por las que supuestamente marchan.
  • La conquista del territorio por los narcotraficantes amparados por encumbradas autoridades nacionales y provinciales, y con la complicidad de capas importantes de las fuerzas de seguridad.

Esta lista de situaciones gritaba “escenario Chávez” de continuar el mismo rumbo del país.

El lector perspicaz sabe que el escenario actual no es perfecto.  Pero las condiciones están dadas para que cada día la economía y la sociedad estén un poco mejor.  El realismo mágico hubiera querido ver que en un santiamén se resolvían todos los problemas que nos angustiaban y nos paralizaban. La decepción que la realidad siempre genera lleva a que estemos pendientes del resultado de una elección legislativa intermedia, en la que sólo se dirimen liderazgos locales sin relevancia nacional.

El equipo de INTEGRA busca siempre ayudar a sus clientes en la generación de una anticipación estratégica que les permita ver más allá de la polvareda del presente. Y fijar la mirada en las oportunidades que un largo plazo ordenado y sensato ofrecen a un país con la naturaleza y la creatividad que tiene la Argentina.

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